El judo nos enseña y exige a todos y todas las judokas comportarnos acordemente a su código moral.
Amistad: el más puro de los sentimientos humanos
Modestia: hablar de uno mismo sin sentirse orgulloso
Autocontrol: es saberse controlar en situaciones críticas
Respeto: sin el cual nunca nacerá la confianza
Sinceridad: es expresarse con la verdad siempre
Educación: el respeto hacia los compañeros
Coraje: es hacer aquello que es justo
Honor: es ser fiel a la palabra dada